LOS ARANCELES DE EE.UU. A MÉXICO, CANADÁ Y CHINA GENERAN INQUIETUD ECONÓMICA – ANÁLISIS DE OKO
El presidente Donald Trump reconoció que los aranceles que impuso a México, Canadá y China pueden causar problemas económicos a corto plazo para los estadounidenses, ya que los mercados bursátiles están cayendo en medio de preocupaciones sobre una guerra comercial. Enfatizó que hablaría con los líderes de Canadá y México el lunes, aunque minimizó cualquier posibilidad de un cambio significativo en la política. Trump también confirmó que los aranceles a la Unión Europea seguirán vigentes y criticó sus prácticas comerciales.
Los aranceles, que afectan a los principales socios comerciales de Estados Unidos, entrarán en vigor el martes. Los economistas han advertido que las medidas podrían frenar el crecimiento económico mundial, aumentar los precios para los consumidores estadounidenses y potencialmente empujar a Canadá y México a una recesión. Sin embargo, Trump argumentó que los aranceles eran necesarios para combatir problemas como la inmigración ilegal y el tráfico de drogas, y expresó su confianza en que beneficiarían a las industrias nacionales en el largo plazo.
Como resultado, los mercados financieros han experimentado fluctuaciones: monedas como el yuan chino, el dólar canadiense y el peso mexicano se han debilitado frente al dólar estadounidense, mientras que los precios del petróleo han subido. Las empresas, en particular las del sector manufacturero y energético, se están preparando para el impacto de los nuevos aranceles.
A pesar de la agitación, algunos analistas mantienen la esperanza de que haya negociaciones futuras. Si bien el gobierno estadounidense no ha delineado las condiciones específicas para eliminar los aranceles, Trump ha prometido mantenerlos hasta que se aborden cuestiones como el tráfico de fentanilo y la inmigración ilegal. En respuesta, tanto México como Canadá han tomado represalias con sus propios aranceles, mientras que China ha prometido desafiar a Estados Unidos en la Organización Mundial del Comercio.
En medio de estos acontecimientos, los funcionarios de la UE expresaron su preocupación. Josep Borrell, el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, enfatizó que no hay ganadores en una guerra comercial, y afirmó: «Necesitamos a Estados Unidos, y Estados Unidos nos necesita a nosotros». El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, también subrayó la determinación de la UE de protegerse de las consecuencias económicas de los aranceles de Trump, lo que indica la determinación del bloque de protegerse de las consecuencias de la guerra comercial.
Un estudio de la Universidad de Yale estimó que los aranceles estadounidenses sobre varias economías podrían costar a los hogares estadounidenses aproximadamente 1.200 dólares al año en pérdida de poder adquisitivo. Los resultados ponen de relieve las crecientes preocupaciones sobre el impacto económico de la guerra comercial de Trump. La Tax Foundation también proyectó un aumento de 830 dólares en los costos anuales para la familia estadounidense promedio. El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, criticó los aranceles, señalando una contradicción con las promesas de campaña de Trump de bajar los precios y proteger los bolsillos estadounidenses. Schumer instó a Trump a detener los aumentos de los aranceles y amenazó con una acción legislativa bipartidista para revertir la política.
El lunes, las tensiones comerciales mundiales aumentaron tras la decisión de Trump de imponer aranceles a México y Canadá, lo que aumentó los temores de una posible desaceleración económica. Los fabricantes de automóviles y las principales acciones tecnológicas fueron las más afectadas, con acciones de empresas como General Motors, Ford, Tesla, Microsoft, Apple y Amazon cayendo en las operaciones previas a la apertura del mercado. Los inversores acudieron en masa a la seguridad del dólar estadounidense y los bonos del gobierno. Los expertos, incluido el economista jefe de JPMorgan, advirtieron que la postura política de la administración podría socavar los esfuerzos para proteger los intereses comerciales.
En medio de estas preocupaciones, algunos expertos legales y políticos advirtieron que las acciones de Trump podrían enfrentar desafíos legales. Varios legisladores, incluidos republicanos, han expresado su aprensión por el aumento de los costos para el consumidor. La opinión pública sobre los aranceles sigue dividida y los inversores siguen monitoreando el impacto más amplio de los aranceles, en particular en industrias como la fabricación de automóviles y la energía.